Un hombre de 50 años, su hijo de 24 y su sobrino de 30 fueron asesinados a balazos. Horas antes, mataron a otro familiar de una puñalada. Todos tenían antecedentes por robo y venta de drogas. Un «ajuste de cuentas«, la hipótesis más firme.
La violenta secuencia que terminó con la vida de cuatro hombres comenzó en la madrugada de ayer, alrededor de las 3, en el barrio El Martillo, en el sudoeste de la ciudad de Mar del Plata. Allí Claudio Granadino (26) fue interceptado por dos hombres que iban en moto y lo hirieron con un cuchillo en una pierna. Tres horas más tarde, se produjo un triple crimen en una casa situada en las calles 429 y Antártida Argentina, en el barrio Monte Terrabusi, donde dos jóvenes que también se movilizaban en moto le dispararon a Pedro Daniel Corbalán (50), su hijo Guillermo Aníbal Corbalán (24) y su sobrino Juan Carlos Giles (30).
Inicialmente, la familia del joven apuñalado denunció que los delincuentes lo atacaron para robarle la moto. Sin embargo, por los datos recolectados por los antecedentes de las cuatro víctimas, la principal hipótesis apunta a que se trató de una venganza vinculada con el narcotráfico. En cuanto a los hombres asesinados a balazos, la Policía cree que los delincuentes los fueron a buscar directamente y que uno de ellos los ejecutó a balazos sin que pudieran defenderse.
Corbalán padre recibió dos balazos, al igual que su sobrino, mientras que a su hijo le impactó uno solo. Los tres murieron prácticamente en el acto, en el interior de la casa. Los cuatro hombres tenían antecedentes penales por robo calificado, robo automotor y otras causas relacionadas con la venta de drogas. Al momento del ataque a tiros se encontraban en la vivienda la concubina del mayor de los Corbalán y otro hijo de éste, de cuatro años, quienes resultaron ilesos.
El triple crimen es investigado por la fiscal de Instrucción marplatense a cargo de la causa, Andrea Gómez, quien sostuvo que los dos delincuentes abrieron a patadas la puerta de la casa, preguntaron por «el rengo» y comenzaron a disparar.
«Estamos ante un hecho que podemos decir que fue un ajuste de cuenta. Fue un ataque certero con armas de grueso calibre (9 y 11.25 milímetros)», indicó la funcionaria judicial, quien agregó que Granadino, víctima del primer hecho, era sobrino de la ex mujer de Pedro Corbalán. Asimismo, precisó que en la escena del triple crimen no se reportó ningún robo.
La Policía precisó que hacía unos días las víctimas del triple crimen habían mantenido una pelea con otros hombres del barrio en el marco de una disputa por la venta de drogas y en la cual Corbalán padre fue herido de bala, lesión por la cual estaba con muletas. «Si no se toman medidas y se aplican políticas adecuadas, tenemos todas las chances de terminar como Rosario», dijo la fiscal del caso.
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