Un hombre reclamó la tenencia exclusiva de sus hijas al considerar que su ex pareja no las cuidaba correctamente. Para el juez Marcos Val, se trató de un pedido con “rasgos machistas y discriminatorios”.
La historia comenzó con la separación del hombre de su mujer, a quien acusó de volver a su casa desde el trabajo “sin ánimos de atender a sus hijas y a él”, indicó Ricardo Carugatti en 99.9 Radio Noticias Web. Tras la ruptura sentimental, la mujer trató de rehacer su vida pero, para su ex esposo, con su comportamiento “no les daba buenos ejemplos a sus dos hijas”.
“El hombre dijo que la conducta de su ex esposa no era moralmente conveniente para sus hijas, por eso pretendía que las chicas vivieran con él”, señaló el periodista. Sin embargo, el fallo del juez Marcos Val, del Juzgado Civil y Comercial Nro. 4 de Dolores, fue muy distinto al que esperaba.
“Probatoriamente no existió nada en el proceso que definió el Dr. Marcos Val. No hubo pruebas que hicieran mención a que era una madre desastrosa que no cuidaba a sus hijas o que las dejaba a la buena de Dios, tal como este hombre sostuvo”, comentó Carugatti.
“El juez decidió que no había que hacer lugar a la demanda y resolvió que no había pruebas fehacientes que determinaran que sea nocivo que las hijas permanezcan con la madre. Por eso definió la tenencia compartida que hasta el momento venían teniendo y además le ordenó a este hombre realizar un curso sobre los derechos de las mujeres”, detalló el periodista. Para el Dr. Val, “la presentación resultaba violenta en sus términos y machista y discriminatoria porque no ponía en el mismo término los derechos y las garantías de los hombres y las mujeres”.
