La aprobación de la Súperliga, que estaba en duda, y la abstención de River Plate, cuyo vicepresidente Jorge Brito admitió no haber votado por la elección de Claudio Tapia como presidente de AFA, sobresalieron al cabo de la Asamblea Extraordinaria que dio por finalizado oficialmente el ciclo de Julio Grondona al frente del máximo organismo del fútbol argentino.
Otra de las abstenciones fue de Colón de Santa Fe, por el que votó José Alberto Alonso (el resultado fue de 40 votos a favor y 3 en contra).
«Estoy contento porque volvió la institucionalidad en el fútbol argentino. Logramos el nuevo estatuto, la Súperliga y el nuevo contrato de televisión», fue por contrapartida la observación que tuvo el flamante vicepresidente primero de AFA, Daniel Angelici, en diálogo con Télam en el predio de Ezeiza.
Y en el mismo sentido se pronunció el nuevo secretario general, Víctor Blanco. «Fue una asamblea muy importante para el futuro. La AFA se merecía esto, porque así va a mejorar», apreció el titular racinguista.
En tanto su par de Estudiantes de La Plata, Juan Sebastián Verón, se manifestó en consonancia pero con un valor agregado: «Me gustaría ser el nuevo director de selecciones juveniles, porque me crié en este predio de Ezeiza y conozco bien el tema», le confió a Télam.
Tapia puede ser reelegido por una sola vez dentro de cuatro años y el Comité Ejecutivo sesionará cada 15 días. «Me pareció que la Asamblea fue muy interesante porque se empieza a cerrar la grieta en el fútbol argentino», argumentó el titular de Acassuso, Javier ‘Pipo’ Marín.
Sin embargo a esa Asamblea le faltaron dos presencias importantes, o en realidad tres, como fueron las de los presidentes Rodolfo D’onofrio, de River Plate, Matías Lammens, de San Lorenzo y Raúl Gámez, de Vélez Sarsfield.
«River votó en contra, pero de acuerdo con el discurso contemporizador de Tapia, estamos dispuestos a dar una mano y colaborar», le dijo Brito a Télam.
La nueva dirigencia afista analizará todo lo resuelto por la Comisión Regularizadora, que hoy concluyó su gestión encomendada por FIFA, y mantendrá una reunión con el entrenador del seleccionado argentino, Edgardo Bauza, en las próximas 48 horas. Tapia fue evasivo a la hora de analizar su futuro.
Los objetivos pasarán por encontrar una mejor imagen y comunicación ante y con Conmebol y FIFA, forjar una estrecha relación con la futura Súperliga que podrían conducir Marcelo Tinelli y D’onofrio, lo que permitiría acercar posiciones con San Lorenzo y River, que hoy están fuera del Comité Ejecutivo, y revisar los contratos en vigencia.