El concejal pinamarense Claudio Galarza está acusado de abuso sexual con acceso carnal
de una menor de su ámbito familiar.
Claudia Sampietro, la madre de la menor, realizó la denuncia en la Comisaría de la Mujer de Pinamar por el abuso sexual durante más de dos años de la menor de sus hijas, que en la actualidad tiene 15 años.
Según informó el diario La Nación, la chica habría sido entregada al concejal del FpV Claudio Galarza por intermedio de su novia, también hija de la denunciante, en un caso que escandaliza a toda la región.
El edil, de 51 años es vicepresidente 2° del HCD de Pinamar y desde hace 5 años tiene una relación con la hija mayor de Sampietro, que en ese entonces tenía 18 años y está señada por su madre como la «facilitadora» de reiterados abusos y violaciones de la menor. Galarza conoció a su pareja en un viaje a Brasil ya que el concejal maneja la empresa de turismo Claudio Galarza Turismo.
Ambos quedaron imputados en una causa a cargo de la Unidad Fiscal número 4 caratulada como «abuso sexual agravado reiterado», según informaron a La Nación fuentes judiciales. El caso quedó radicado ante el juez de Garantías N° 6 de Villa Gesell, David Mancinelli. La denunciante y la víctima brindaron declaración testimonial el miércoles pasado y el juez dictó una medida cautelar de prohibición de acercamiento a requerimiento de la fiscalía interviniente.
Tras la denuncia, se ordenaron distintas medidas de prueba: declaraciones testimoniales y peritajes psicológicos y psiquiátricos de víctimas e imputados. De reunirse elementos suficientes, adelantaron las fuentes, se podría citar a declarar a los acusados e incluso requerir su detención.
Testimonio de la Denunciante
Según Claudia Sampietro, el abuso deshonesto hacia su hija empezó «cuando ella tenía entre 12 y 13 años. Y la violación con acceso carnal fue a los 14. El abusador, lamentablemente, sería mi yerno, el concubino de mi hija de 23 años. Denuncié a mi hija, también. Hice lo correcto, por más que me duela, porque es mi sangre, es mi hija. Pero no puedo tapar esto».
«La pervertían sexualmente entre tres y cuatro veces por semana. Los primeros meses le hicieron practicar sexo oral y masturbaciones. Y después él empezó a violarla. La hermana, según la nena, nunca estuvo cuando la ultrajó carnalmente. Pero sí la hacía participar de la masturbación y del sexo oral. Se detuvieron a mediados de este año, cuando mi actual pareja se mudó con nosotros. Mi hija menor se sintió segura con él viviendo acá. Y la semana pasada se animó a hablar», explicó la mujer de 48 años a La Nación.
Repercusiones en el Concejo Deliberante
Consultados por La Nación, desde el bloque del Frente para la Victoria de Pinamar manifestaron que «estarán a derecho con la Justicia». «Respetamos el proceso que está llevando a cabo el fiscal y el ámbito donde ocurre», dijo el concejal Gregorio Estanga y sobre la posibilidad de que su compañero de bloque se aparte del cargo mientras se lleva a cabo la investigación, contestó: «Es todo muy reciente como para tomar esa decisión. No podemos decir nada más por respeto a la Justicia y a la menor».
Por su parte la bancada del Frente Renovador a través de una nota enviada a la Mesa Permanente del Deliberativo, consideró “inexcusable” la permanencia del edil “en sus tareas representativas de la sociedad hasta que la justicia no se expida sobre el caso”.
Al mismo tiempo, solicitaron que el Frente para la Victoria “tome la medida de solicitar al denunciado la suspensión preventiva y transitoria de su labor en el Concejo Deliberante para preservar la honorabilidad de ese cuerpo”.
En la misma sintonía estuvo otro pedido -revelado por el sitio Pinamar 24-, el cual fue
presentado ante la presidencia del Cuerpo por la red de mujeres de la costa, integrada por
diferentes organizaciones no gubernamentales y voluntarias que trabajan en contra de la
violencia de género, el abuso infantil y la trata de personas, entre otros ejes.
Fuente: La Nación y agencias
Foto: La Nación
