
La Casa de Veteranos de Guerra y Familiares del Partido de La Costa difundió un comunicado para distinguir entre quienes participaron activamente del conflicto de 1982 y quienes hacen referencia a la movilización militar por el canal de Beagle en 1978. Advirtieron sobre la “confusión” que puede generar el uso indebido del término veterano.
Desde la Casa de Veteranos de Guerra y Familiares del Partido de La Costa emitieron un comunicado dirigido a la comunidad para reafirmar que los únicos veteranos reconocidos oficialmente por el Congreso Nacional y el Ministerio de Defensa son aquellos que participaron activamente en el conflicto armado de la Guerra de Malvinas, en tierra, mar o aire.
En el texto, firmado por el presidente de la institución, Juan J. Moray, se hace referencia a personas que hoy se autoproclaman veteranos de un conflicto que solo se dio en el plano diplomático, vinculado a la movilización de tropas durante la tensión por el canal de Beagle en 1978. “No fue nada más que eso, como podría haber sido una movilización para ejercicios militares”, aclaran desde la institución.
En ese sentido, expresaron su preocupación por la utilización del término “veteranos” por parte de algunos sectores, ya que consideran que esto “sirve para acrecentar la confusión general y se enmarca en una desmalvinización a la que no queremos regresar”.

Comunicado completo de la Casa de Veteranos de Guerra y Familiares del Partido de La Costa
Desde la CASA DE VETERANOS DE GUERRA Y FAMILIARES DEL PARTIDO DE LA COSTA, nos dirigimos a la comunidad de nuestro Partido a fin de aclarar que los únicos veteranos reconocidos, tanto por el Congreso Nacional como el Ministerio de Defensa, son aquellos que actuaron desde tierra, mar o aire, en el conflicto armado de la Guerra de Malvinas, donde quedaron 632 argentinos.
Hay quienes se autoproclaman, hoy, veteranos de un conflicto que lo fue sólo en el ámbito de la diplomacia, que comenzó con una movilización de fuerzas hacia el canal de Beagle, con el propósito de hacer una invasión de las islas en disputa el día 22 de diciembre de 1978, que no se concretó, y se resolvió dejar la misma en manos de la mediación papal, y que si bien hubo movimientos en el área fronteriza cordillerana, no fue nada más que eso, como podría haber sido una movilización para ejercicios militares.
Es por lo expuesto que queremos aclarar a las autoridades municipales, educativas, medios de comunicación y a la comunidad toda, que la incursión de ciertos grupos que con la palabra “veteranos”, aludiendo a un conflicto que sólo terminó existiendo en el ámbito diplomático, sirve para acrecentar la confusión general y se enmarca en una desmalvinización a la que no queremos regresar.
VGM Juan J. Moray
Presidente.