Avanza el desarrollo del juicio por la agresión a un joven que tuvo lugar en el verano de 2012. La causa tiene como imputado a Tomás Mac Gaw, un rugbier de 22 años.
El hecho ocurrió el 14 de enero de 2012 en la localidad de Pinamar. Un adolescente fue atacado en una playa céntrica y, por los golpes, perdió la visión de un ojo.
“Está imputado en esta causa un jugador de rugby del club San Albano, llamado Tomás Mac Gaw, de 22 años. Él y un menor, que ya fue encontrado culpable del hecho, son los responsables de la agresión a un joven a quien le hicieron perder la vista de un ojo a causa de los golpes”, explicó Ricardo Carugatti en Radio Noticias Web.
“Los abogados dicen que lo que le produjo la pérdida del ojo es un golpe tremendo aplicado sobre una persona indefensa, tirada en estado de inconciencia. Le causó una explosión que le rompió la nariz en varias partes, el pómulo y le cortó el parpado. El desplazamiento de algunos huesos hacia la parte ocular lo dejó ciego”, agregó el periodista.
De acuerdo a lo expresado por testigos en el juicio que comenzó el pasado lunes 3, los agresores “festejaban” cada golpe que le propinaban a la víctima.