El Partido Frente Grande afirmó que la política exterior de Javier Milei va en el sentido exactamente opuesto a la tendencia mundial. Se alinea incondicionalmente con el capitalismo financiero globalizado, que ha llevado al mundo socialmente a la ruina, ha ocasionado una catástrofe climática y le ha entregado la gobernanza a las grandes corporaciones.
La renuncia a los BRICS implica abdicar de la integración con los aliados comerciales más importantes de la Argentina -lo cual incide directamente sobre el empleo y el desarrollo industrial- sino también con el conjunto de países más dinámicos en términos de inversión, nuevas tecnologías y estabilización política del planeta. Los BRICS son, además, los principales proveedores de alimentos y energía a nivel mundial.
El distanciamiento con Brasil aísla a la Argentina del proceso de integración regional que, ante la actual situación internacional, está en condiciones inmejorables para convertirse en un bloque autónomo de poder en un mundo que avanza a la multipolaridad.
Por el contrario, Milei y su canciller Mondino han decidido subordinarse a quienes han gobernado la unipolaridad agonizante, responsable de la descomunal e inmoral concentración de riqueza y de la tragedia ambiental. Y que sólo encuentra como camino para sostener su tasa de ganancia el incremento de los presupuestos militares de la OTAN en beneficio del complejo militar industrial, es decir, de la inestabilidad y la guerra.
La OTAN es la potencia usurpadora de nuestro territorio en Malvinas y el Atlántico Sur. Y, al mismo tiempo, la principal alianza internacional de Milei. Su lectura de la política internacional atrasa medio siglo.
